Cambiando el escenario formativo. De los objetivos a las Competencias.

Cuando nos referimos a la estructuración de un currículo por competencias en El Salvador debemos tener en mente el reto al que se enfrentará la institución que desee planificarlo, ejecutarlo y evaluarlo.

Para iniciar con paso firme en la ruta de la formación por Competencias se hace necesario que la institución cuente con una Misión y Visión, estas deben ser comprendidas por el cuerpo docente y administrativo, sólo de esta forma hay un rumbo hacia dónde dirigirse. Otro elemento fundamental lo constituye el Modelo educativo de la institución, debiendo ser ejecutado en forma vivencial por los docentes y administrativos, para ello se requiere de ciertas “competencias universales”, algunas de estas han sido mencionadas en este blog.

Un tercer elemento nos acerca al alumno, específicamente a su nivel de madurez cognitiva y psicológica, entre mayor sean ambas, mayor será el aprendizaje, convirtiéndose en un profesional competente. Esto hace referencia a que el alumno debe ser consciente del rol que se espera de él, para que el modelo y el currículo se cumplan; por tanto, debe ser conocedor de estos. Desde luego no se necesita un proceso de información complicado para que el alumno participe activamente, se necesita comunicación auténtica con él, en la que él se sienta incluido en el equipo de trabajo curricular, y en el trabajo educativo que posteriormente se desarrollará en el aula y centros de práctica.

Así que luego de revisar estos tres elementos que están fuera de su control:

Recursos, Misión y Madurez de los estudiantes en su entorno, lo que queda por hacer es aún favorable, porque la educación ayuda a romper con círculos viciosos, y por que el trabajo de alto desempeño hace crecer a las instituciones. Por tanto, en la medida que el reto sea mayor, más posibilidades habrá de aprendizaje y de contribución; y estas son buenas noticias para emprender esta aventura.

La estructuración de un currículo por competencias puede sustentarse desde el tradicional currículo por objetivos didácticos, sin olvidar dos consideraciones importantes: a. Las competencias deben responder a las necesidades de los empleadores potenciales de estos nuevos profesionales, y b. Las competencias no se evalúan igual que los alcances por objetivos.